Trucos para que los conejos sobrelleven mejor el calor

En verano todos los animales son más susceptibles de sufrir un golpe de calor y los conejos no se quedan fuera de esta situación. El hecho de tener un conejo como mascota te puede llevar a pensar que, al no salir de casa y tenerle en una jaula con el acondicionamiento necesario, no puede sufrir un golpe de calor ni estar aletargado. Nada más lejos de la realidad, ya que estos animales sufren el calor igual o más que una persona y requieren de ciertos trucos para sobrellevar mejor las altas temperaturas.

Es fundamental utilizar una serie de trucos para que el conejo sobrelleve mejor el calor de verano

A partir de los 30 grados y en adelante, los conejos pueden estar mucho más aletargados y cansados, especialmente cuando hay humedad. También con el calor seco se pueden sentir muy abotargados y sin ganas de correr o saltar. No te preocupes, porque esto es algo que les sucede a todos los animales. Solo hay que tratar de encontrar trucos que eviten que el calor vaya a más y se convierte en un golpe de calor que haya que tratar en el veterinario.

Refrescar el agua

Uno de los trucos más sencillos a los que se puede recurrir cuando hay altas temperaturas y se tiene un conejo como mascota, es refrescar el agua del bebedero. Los conejos suelen beberse uno al día (dependiendo del tamaño) por lo que, en verano, las altas temperaturas harán que, al final del día, ese agua esté caliente y no les guste demasiado. Si notas que deja de beber o, simplemente, crees que está demasiado caliente y que no le gustará, añade unos hielos a la bebida para que esté fresquita durante más tiempo. Seguro que el conejo te lo agradecerá.

Botella refrescante

Otro de los trucos que, con toda probabilidad, habrás podido observar en zoos o lugares con animales, es que en verano les suelen dar la comida metida en grandes bloques de hielo para que les resulte más apetecible. Precisamente por esto, pero sin tener relación con la comida, es uno de los trucos con más efectividad que hay para que el conejo se refresque en su totalidad.

Prestar atención a la paja de la jaula así como a la alimentación del conejo

Este sencillo truco consiste en meter una botella de agua de plástico que ya no se vaya a utilizar y dejar que se congele por el exterior. Después, hay que colocarla en el suelo de la jaula del conejo y así el animal podrá recostarse sobre ella siempre que quiera y eliminar un poco el calor de su cuerpo. Hay que pensar que los conejos tienen gran cantidad de pelo pero que, en función de la época del año, van mudando el pelo y en verano tienen un pelo mucho más flojo que no les da tanto calor. A pesar de esto, la botella congelada es un gran acierto para el verano.

Echar menos paja en la jaula

Otro de los aspectos que seguro has notado con la llegada de las altas temperaturas es que tu mascota comienza a escarbar en la jaula hasta llegar al fondo de la paja para retirarla por completo. Aunque la paja sea utilizada para recoger mejor las necesidades del conejo y para que tenga una cama mullida en la que estar cómodo, lo cierto es que estos lagomorfos necesitan un fondo fresco para soportar el calor y no es raro que retiren toda la paja que tengan en su jaula para tumbarse directamente sobre el plástico de la jaula y así sentirse más frescos. En verano echa menos cantidad de paja en el fondo y le pondrás más fácil la tarea de retirarla.

Un ventilador, pero no de lleno

Al igual que en los humanos, a los conejos les viene bastante bien que un ventilador les refresque de vez en cuando. Si dispones de un ventilador giratorio, aprovecha esto para colocar al conejo a un lado y que le de el aire de forma esporádica y no de lleno. El hecho de que el aire del ventilador le dé de frente y de forma constante al conejo, puede producirle enfriamiento, por lo que un poco de aire de vez en cuando y no de forma directa, hará que tu conejo disfrute mejor del verano y no le afecten las altas temperaturas de los hogares.

Refrescar las orejas

Las orejas es uno de los puntos del cuerpo del conejo en el que más se nota el calor que tienen, sería equivalente a tocar la frente en un humano para saber si tiene fiebre. Por eso, cuando empieza a subir la temperatura, es conveniente tocar de vez en cuando las orejas de tu mascota, introduciendo un poquito el dedo, para ver si están muy calientes. Si, efectivamente, lo están, puedes mojarte las manos con agua y refrescarle esta parte del cuerpo. Notarás como la temperatura de las orejas disminuye ligeramente y, con ello, toda la temperatura del cuerpo.

Refrescar las orejas y darle comida fresca puede hacer que tu conejo afronte mejor el calor

En las orejas es en la parte del cuerpo del conejo en la que más notará la bajada de temperatura, pero nunca viene mal que, si se aprecia que el animal está muy aletargado y con mucho calor, se le puede echar un poquito de agua con un spray por el cuerpo sin llegar a empaparle, para que sienta el frescor y esté mucho más a gusto.

Comida fresca

Como no podía ser de otra manera, la alimentación también es muy importante en verano. No porque las temperaturas sean elevadas hay que cambiar los alimentos que se le proporcionen al conejo, pero sí que se puede incorporar alimentos más frescos y más apetecibles para tu mascota. A parte de el preparado habitual que se puede encontrar en cualquier tienda especializada en mascotas, hay que darle frutas y verduras que contengan agua para que les aporte un mayor frescor. La rúcula o la manzana son dos alimentos que les gustarán y con los que podrán refrescarse en verano. Cuida de tu mascota y evita que las altas temperaturas le pasen factura.