Por el nombre seguramente no conoceremos esta raza de perro, pero una vez lo veamos podremos reconocer al Mudi, una mascota diferente y leal. Este perro de aspecto diferente no es muy común en las grandes ciudades, dados a sus orígenes como perro pastor y su tamaño, pero puede llegar a ser la mascota ideal para muchas familias.
Si estás pensando en adquirir un can de raza Mudi como mascota o ya tienes uno en casa deberás conocerlo mejor con tal de asegurarte si es la mejor para tu situación o si le estás proporcionado los cuidados que necesita. Por eso, en Bekia te contamos todo lo que debes saber sobre el Mudi: sus orígenes, características físicas, cuidados básicos y su temperamento, para que puedas darle la mejor educación y sentiros felices en el hogar.
Orígenes del Mudi
Los orígenes del perro de raza Mudi los encontramos en Hungría en el siglo XVIII. Allí se mezclaron perros pastores locales, como el Pumi, el Puli y el Komondor, con otros perros pastores alemanes, dando lugar a esta nueva mascota. Se creó esta raza de perro boyero porque era mucho más apto para las tierras donde iba a trabajar, además de ser más fuerte y resistente que el resto de las razas que existían hasta el momento.
Durante la Alta Edad Media fue un perro boyero muy popular en los Balcanes y muchos de los pastores contaban con esta mascota como ayuda principal con sus ramados. Sin embargo, con la llegada de la Segunda Guerra Mundial la raza se dio por desaparecida y no fue hasta los años 70 del siglo XX que se intentó recuperar. En la actualidad este tipo de perro vuelve a estar presente y no es de extrañar encontrárnoslo como mascota, no solamente en Hungría, sino también en Europa y muchos otros lugares de todo el mundo.
Características del Mudi
El Mudi es un perro de tamaño mediano que mide entre 35 y 45 centímetro s de la cruz y pesa entre 10 y 15 kilos. Su esperanza de vida es entre los 8 y los 10 años. El rasgo más característico de esta mascota es su pelaje, que suele ser liso y corto solamente en el rostro y rizado y largo en el resto del cuerpo, empezando por el cuello.
Este pelaje es duro y fuerte, similar al de una oveja, lo que le da un aspecto muy original y particular a la raza. El color del pelo puede ser blanco, negro o marrón en su totalidad, aunque algunos ejemplares pueden tener dos o más de estos colores a la vez. El Mudi más común es el que es totalmente de color negro.
Su cuerpo es de forma rectangular, por lo que sus patas son bastante más cortas que el largo de su cuerpo. La cola es larga y curvada, donde más cantidad de pelo se acumula, como en el pecho y el cuello. La cabeza es pequeña y tiene las orejas puntiagudas. El morro es alargado y suele tener los ojos de color marrón o negro bien centrados. Es un perro robusto y con mucha fuerza.
Carácter y cuidados del Mudi
El carácter del perro de raza Mudi es excelente para aquellos que no han tenido perros en casa antes, ya que suelen ser, generalmente, canes muy tranquilos que están dispuestos a aprender lo que su dueño quiera enseñarles.
No obstante, no por eso debemos de ser constantes en nuestro entrenamiento si queremos que nuestra mascota se comporte del mejor modo posible y que no tengamos sorpresas negativas e inesperadas. Además de tener una casa grande o en el campo debido a su carácter y tamaño.
Uno de los mayores problemas del carácter del Mudi es que crea un vínculo muy fuerte con sus dueños. Tiende a escoger a aquel que más atención le presta en su educación y paseos, siguiendo solamente sus órdenes y llevando peor las de los demás. Por eso, es esencial que le enseñes que no tiene un solo dueño y que debe comportarse debidamente ante todos.
Si tienes niños en casa nunca los dejes solos con el perro, deben encontrarse siempre bajo tu supervisión, por mucha confianza que tengas con el animal de esta o de cualquier otra raza.
Esto también hará que sea muy desconfiado ante la gente que desconozca y se muestre receloso, así que avisa a los demás de que no se tomen demasiadas confianzas con él hasta que no se conozcan bien. Recuerda que un perro es un animal y siempre puede tener reacciones inesperadas, pero de tu vigilancia y supervisión depende que no tengáis ningún susto.
Una manera de tener a nuestro perro de raza Mudi feliz es haciendo el ejercicio que necesita a diario. Los perros de tamaño mediano es mejor que vivan en casas grandes, preferentemente con jardín, lo que no excluye que tengan que salir a pasear junto a sus dueños al menos tres veces al día y durante unos 20 minutos. Si puedes sácalo al parque los fines de semana para que pueda correr y interactuar con otros perros, con los cuales suele tener muy buena relación.
En cuanto a la salud del Mudi hay que tener en cuenta que es un perro muy fuerte, debido a su procedencia de perro pastor y que no suele sufrir grandes problemas de salud. Sin embargo, necesita mantenerse activo tanto física como psicológicamente, de lo contrario puede desarrollar enfermedades como estrés o ansiedad canina.
No dudes en consultar a tu veterinario o experto canino si ves que tu perro rompe cosas cuando no estás, ladra sin cesar, deja de comer y beber con normalidad y da vueltas constantemente en círculos, ya que estos son claros síntomas de que algo no va bien.
Su pelaje es uno de los rasgos más bellos de la raza que también necesita ser cuidado, por lo que no olvides cepillarlo al menos una vez al día para que se mantenga limpio y desenredado luciendo de la mejor manera. Puedes acudir al peluquero canino para recortarlo un poco, pero recuerda que es su marca distintiva y normalmente sus dueños se lo dejan largo.