La raza de gato Burmilla, como ocurre con otras muchas trazas su origen fue de manera fortuita. Se trata de un cruce entre un macho de gato persa chinchilla y una gata burmés de color lila. Esta raza fue registrada por la Asociación Felina Británica (su país de origen), en el año 1983, pero fue hasta los años 90 cuando realmente esta raza fue reconocida de manera internacional. El gato Burmilla, es una raza de tamaño medio, pero que es de complexión fuerte, robusta y musculosa.
En cuanto a sus características físicas, la raza Burmilla tiene unas patas fuertes, una cabeza bastante llamativa, ancha y redondeada. Por otro lado, sus orejas, son de tamaño medio y sus ojos bastantes rasgados, lo que hace que tenga una mirada de lo más especial. El color suele ser verde con el borde de los párpados de color negro. Su cola es larga, recta y de punta redondeada. Por su parte, el pelo del gato Burmilla es muy sedoso, brillante y fina. Esta raza puede encontrarse en diferentes colores : con base plata o blanco, y los pelos pueden ser bicolor combinados con negro, azul, canela, lila, crema o incluso rojizo.
Al ser de tamaño mediano puede pesar entre unos 4 o 7 kilos. Es recomendable que jueguen ya que los gatos se pasan la mayor parte del tiempo durmiendo y tienden al sobrepeso. Su esperanza de vida, oscila entre los 10 y los 15 años siempre en función de las enfermedades que pueda padecer y de la calidad de vida, para ello el pienso y su comida y por consiguiente, sus cuidados deben se lo más óptimos posibles. Es una raza bastante tranquila y casera, y para sorpresa de muchos, es una raza que le gusta estar en familia y los más pequeños de la casa.
Comportamiento del gato Burmilla
Si hay algo que caracteriza a la raza Burmilla es que es un ejemplar bastante plácido y sosegado. No es una mascota que ponga problemas o sea del todo arisca tal y como suelen ser los felinos. Su trato es sencillo y puede llegar a ser incluso cercano, además requiere muy pocos cuidados. La raza Burmilla se caracteriza por ser cariñosa y dulce y su compañía es de lo más agradable. Por si fuera poco, es una raza de lo más inteligente por lo que se podrá jugar con ella y pasar ratos de lo más divertidos. Es más, no se quejará ni se irá, pues le encanta pasar ratos en familia.
En el caso de que se tenga otra mascota en la vivienda no habrá problema, ya que esta raza respeta el espacio de otros animales, incluso puede llegar a crear una amistad. Es una raza amigable ideal para adoptar. Aunque le guste estar en familia y sus largas siestas, también tienen pasión por los paseos por las zonas del exterior, ya que tienen una gran capacidad de adaptación. La raza Burmilla es una gran trepadora y dan unos saltos impresionantes, por lo que fácilmente pueden subir a lugares altos como pueden ser las ramas de los árboles o alguna estantería, por lo que hay que tener especial cuidado de que no se hagan daño cuando hacen este tipo de cosas.
La tranquilidad es otro de los rasgos que permanece con la raza Burmilla, y en esos momentos les encantan que los adoren, les froten con cariño el estómago, y por supuesto les acaricien. Sin duda, no puede faltar la ración diaria de mimos para los gatos de raza Burmilla, lo agradecerán y se creará un vínculo más estrecho con la familia y la mascota.
Cuidados del gato Burmilla
En relación con los cuidados de la raza de gato Burmilla, no son muchos como se mencionó anteriormente, ya que como cualquier gato se suelen acicalar solos y son bastante pulcros. Es importante cuidar su alimentación, y que esté adaptada a sus necesidades para así cubrir el cupo de nutrientes diarios que necesitan para mantener buenas defensas y por consiguiente, evitar el famoso sobrepeso. Si la mascota lleva una vida saludable y una correcta alimentación no tiene porque enfermar.
Por otro lado, en cuanto al cuidado de su pelaje, basta con cepillarlo de vez en cuando para así de esta manera poder ir eliminando ese pelo muerto que siempre aparece. Al hacer este sencillo paso se evitará que se traguen las bolas de pelo y les pueda producir cualquier tipo de mal estar. No suele perder demasiado pelo, pero es bueno llevar un control diario. Para evitar que la mascota se moleste, esta acción se deberá realizar durante el juego para que de esta manera lo asocie en próximas ocasiones y no trate de evitarlo. Asimismo, la salud de la raza de gato Burmilla suele ser positiva, y no se conocen enfermedades congénitas asociadas a esta raza.