Si te gustan los perros muy grandes tienes que conocer esta raza. El Leonberger es uno de los canes de mayor tamaño en el mundo y se le reconoce fácilmente a simple vista. Puede que sus grandes dimensiones puedan asustar a más de buenas a primeras, pero esta raza de perro puede ser la mascota ideal si le proporcionamos el hábitat adecuado y todos los cuidados que necesita.
Tanto si ya tenemos un Leonberger en casa o estamos pensando en adoptar uno como mascota, en Bekia t e contamos todo lo que debes sobre la raza para que podáis ser felices durante toda su vida. Conocerás entonces sus cuidados básicos, sus características esenciales, su comportamiento y cuál es la mejor familia para su salud física y mental, siendo así una mascota querida y muy feliz.
Orígenes del Leonberger
Esta raza de perro se originó en la ciudad alemana que le da nombre, Leonberger cerca de Stuttgart, a principios del siglo XIX. En esta ciudad el clima era muy frío en invierno y la gente de alta clase necesitaba un perro, no solamente como animal de compañía, sino también como protector.
Para crear la raza Leonberger se mezclaron perros de gran tamaño como el Dogo, el San Bernardo y el Mastín. De este modo se generó la raza que conocemos actualmente y que, poco a poco, pasó también a formar parte de muchos otros hogares por todo el mundo.
Características del Leonberger
Seguramente reconoceremos la raza por su gran tamaño y particular pelaje. El Leonberger es una de las mascotas caninas más grandes que existen. Siendo adulto puede llegar a medir entre 65 a 80 centímetros de la cruz, casi el doble estando de pie sobre sus dos patas traseras.
En cuanto al peso, pueden llegar a pesar desde 45 a 78 kilos, manteniéndose en su peso. Por lo tanto, es un animal que debe tenerse en unas condiciones muy particulares y no es apto para dueños primerizos.
El pelaje del Leonberger es largo y suave, tricolor : negro, blanco y canela. Dependiendo del ejemplar puede predominar más un color u otro, pero el marrón claro es el más común de todos ellos. El pelo es muy parecido al del San Bernardo, pero lo que hace diferente una raza de la otra es el rostro.
Esta mascota tiene el morro mucho más alargado que el San Bernardo y los ojos más pequeños y redondos. Con el Leonberger no tenemos la impresión de que tiene un rostro triste o los ojos caídos, como es el caso del San Bernardo. En la cola se concentra una gran cantidad de pelo, la cual tiene muy larga y elegante.
Las patas traseras son mucho más fuertes y musculosas que las delanteras, puesto que este perro de montaña tiene una constitución idónea para correr durante horas en terrenos áridos haciendo frente a cualquier tipo de adversidad climática.
Las orejas son pequeñas y las tiene gachas a ambos lados de la cabeza, con también gran cantidad de pelo ondulado sobre ellas. El cuerpo es rectangular y muy estilizado. El cuello parece más fuerte y robusto, pero en realidad concentra en él mucho pelo, lo que le da un efecto muy leonino.
Cuidados del Leonberger
Aunque los perros de gran tamaño tienen un carácter muy tranquilo deben estar muy bien educados si no queremos tener algún susto inesperado. Además no debería adoptarlo una persona sin experiencia en perros, puesto que le será mucho más difícil de controlar que quizás otra raza de dimensiones más adecuadas a su situación.
Si estás pensando en adquirir un Leonberger es muy importante que sepas que es un perro de montaña que necesita mucho espacio para poder moverse con tranquilidad y que no es nada adecuado tenerlo en un piso. No solamente el animal será muy infeliz viviendo en un piso, sino que también tú sentirás que no cabéis ambos en un espacio tan pequeño.
Por lo tanto, este perro es ideal para tenerlo en zonas residenciales, en casas grandes con jardín. No obstante, esto no implica que no debas sacarlo a pasear al menos tres veces al día durante más de media hora. Si tienes la posibilidad de dejarlo suelto, mejor. Seguramente no quiera correr durante mucho rato, sino que andará junto a ti, pero la sensación de tener libertad de movimiento le hará mucho bien. Recuerda que el paseo es para ambos, no lo dejes suelto y te sientes sin hacerle caso, porque tu mascota te necesita a ti en este momento tan especial del día para ella.
Dadas sus características físicas es mejor que no tengamos este perro cuando es cachorro o durante su etapa de aprendizaje junto a niños, ya que a veces no es consciente de su gran tamaño y puede llegar a dañar muy seriamente a alguien. No solo por sus características, sino porque nunca debe dejarse a un perro junto a niños sin la supervisión de un adulto.
Como la mayoría de perros de gran tamaño el mayor problema médico que suelen tener es la displasia de cadera. Si no andan lo suficiente ni hacen el ejercicio necesario, cuando llegan a ser mayores se les desplaza el hueso de la cadera y no pueden andar con normalidad, los casos no tratados a tiempo pueden incluso perder la movilidad de las patas traseras, por eso es muy importante que le prestemos el cuidado y la atención necesaria a nuestra mascota.
Al tener un pelo largo y frondoso lo mejor será que lo cepillemos al menos una vez al día para mantenerlo limpio, sano y cuidado. También deberemos bañarlo al menos una vez al mes y darle la alimentación necesaria acorde a sus grandes dimensiones. No todas las marcas de comida para perros son iguales ni todas las razas necesitan el mismo pienso. Lo mejor será que te dirijas a tu veterinario y le preguntes cuál es el mejor alimento para tu mascota. Siguiendo todas las indicaciones necesarias y tratando a tu mascota como se merece tu Leonberger y tú podréis ser para siempre felices, haciéndole sentir como un miembro más de la familia.