Los gatos también necesitan unos hábitos de higiene bucal así como los humanos, con el fin de prevenir algunos problemas dentales. Mucha gente no lo sabe, pero la boca es una de las partes más sensibles de los gatos, por eso aquí te contaremos los síntomas más frecuentes de los diferentes problemas dentales que puede presentar nuestra mascota para que te alertes y acudas cuanto antes al veterinario.
Antes de pasar a las diferentes enfermedades que puede tener nuestra mascota en la boca, es importante entender que la formación de la 'placa dental' es el origen de la mayoría de los problemas bucales. Normalmente, el diente está recubierto por una pequeña película formada por saliva y determinadas bacterias no patógenas. Esta capa se renueva con un cepillado o por rozamiento del alimento. Si esta renovación no se produce, la placa aumenta su grosor y se depositan más bacterias.
Un buen cuidado y cepillado de los dientes de nuestra mascota podrá ayudar a prevenir las distintas enfermedades que os mostraremos luego. En caso de sospechar de que nuestros gatos puedan estar padeciendo algún tipo de problemas dentales, lo que deberíamos hacer es acudir al veterinario cuánto antes para confirmar qué tipo de afección puede tener, así como el tratamiento que se le deberá aplicar.
Los problemas dentales más comunes en los gatos
1. El sarro
Los gatos poseen una saliva que produce una serie de minerales, y en el caso de que no se lleve un cuidado dental, esa acumulación de sales minerales producirá el sarro. El principal problema de la acumulación del sarro es que la encía de los gatos se inflaman, además de los tejidos que unen la pieza dental con el alveolo dental. Lo que lleva a que el diente afectado por el sarro acabe cayendo.
El sarro es sencillo de ver a simple vista, ya que es más grande y adquiere un color amarillento o marrón en la superficie del diente. Puede aparecer en cualquiera de los dientes de nuestra mascota, pero es más frecuente en la parte externa de los molares y premolares de los gatos, así como en los incisivos. Un simple cepillado de dientes no servirá para eliminar el sarro, sino que tendremos que acudir al veterinario para que lleve a cabo una limpieza profesional.
2. La resorción dental
Aunque esta enfermedad se produce cuando los gatos son más mayores, también la pueden padecer los jóvenes. Ya que la sufren un 60% de los gatos aproximadamente. Este problema dental consiste en inflamación de los tejidos que recubren el diente, llegando a deteriorarse poco a poco, provocando que el diente pueda romperse. La raíz se destruye, y puede dar lugar problemas más graves.
Los síntomas que nuestros gatos pueden presentar si padecen este problema es un babeo constante. También, pueden negarse a comer. Otro claro síntoma es cuando tu gato se ha plantado delante del plato con ganas de probar bocado, pero no ha llegado a comer. El origen de esta enfermedad se desconoce todavía.
3. La gingivitis
La gingivitis en los gatos es la inflamación de la encía que rodea al diente, además es muy frecuente en gatos de todas las edades y puede variar en función de la gravedad. Las causas de esta enfermedad son varías, desde unas raíces dentales que se han quedado alojadas dentro de la encía, depósitos de sarro, una alimentación inadecuada, infecciones o, hasta, trastornos del metabolismo.
Uno de los primeros síntomas de la gingivitis es la aparición de una zona roja alrededor del diente del animal, debido a la inflamación. Este problema lleva a hacer que el gato tenga sangrados dentales y dolor en las encías. Puede provocar también la perdida de piezas dentales. Esta enfermedad debe ser tratada cuánto antes, ya que si no se trata puede derivar a una infección general.
Los gatitos que cuentan con apenas 5 meses de edad pueden presentar gingivitis. Esto se debe a la salida de los primeros dientes permanentes y la inflamación de encía que eso conlleva. Normalmente, pasadas unas cuatro o seis semanas esto deja de pasar, pero si el problema persiste lo más aconsejable es consultar con el veterinario.
Tratamiento y prevención de las enfermedades dentales
El principal tratamiento es la eliminación de la placa dental, en un saneamiento de los tejidos que rodean a los dientes y en tratamientos antibióticos, que controlen la infección bacteriana en el caso de la gingivitis. Para la limpieza bucal, el veterinario utilizará una suave anestesia para poder llevar a cabo el tratamiento.
Hay gente que utiliza tratamientos caseros que no dan resultados y que, incluso, pueden ser hasta peligrosos para nuestra mascota. Por ello, si descubres que la enfermedad está en sus inicios acude a un veterinario. No te dejes aconsejar por amigos o familiares que puedan más o menos conocer del tema, tu mascota necesita a un especialista.
La prevención de estas enfermedades es posible, además de ser necesaria para que nuestro gato no lo pase mal en el futuro. El cepillado de dientes se debe realizar con una pasta adecuada y, en un principio de forma semanal. También, intenta evitar dietas blandas, por ejemplo comida en lata, y especialmente las comidas caseras, restos de nuestra comida y golosinas con mayor número de azúcares. Lo mejor es alimentar a nuestros gatos con alimentos secos, que incorporen en su fórmula 'pirofosfatos' (minerales que ayudan a prevenir la formación del sarro). Y, sobre todo, acude al veterinario para que realice de vez en cuando una revisión dental a tu mascota.