Para que tu mascota siempre se encuentre siempre con un estado de salud óptimo, hay que llevarlo siempre al veterinario y nunca automedicarlo, pues hay ciertos medicamentos que pueden ser perjudiciales para su salud y podría agravar la dolencia que padece, es más algunos medicamentos pueden ser altamente tóxicos para los gatos. La mejor opción siempre será llevarlo al veterinario ya que será él quien dictamine unas pautas para el tratamiento del gato con sus correspondientes dosis, y durante cuanto tiempo lo debe tomar.
Intoxicación por medicamentos en gatos
De esta manera, podremos saber los efectos secundarios y no alarmarnos si esto ocurre. Al igual que las personas, los gatos deben tener un control bajo un profesional por si no mejora, por si le produce algún tipo de reacción alérgico o cualquier otro motivo anormal. Es también importante que el gato no tome medicamentos humanos y mantenerlos lejos de estos, porque jugando puede ingerir por error alguno de ellos. Para ello, es esencial guardar en un lugar seguro los medicamentos para personas, para así asegurarnos que todo está en orden, incluso guardarlos en tarros que no puedan abrir. También hay que evitar dejar pastillas sueltas por el mismo motivo que el anterior.
Si un gato se toma por error un medicamento que puede ser tóxico para el, comenzará a comportarse de manera diferente. Generalmente por una pastilla no ocurre nada grave, pero si le da alergia o algún efecto secundario, el desenlace puede ser algo negativo. Para ello, si el felino presta los siguientes síntomas y se cree que ha podido ingerir un medicamento hay que llevarlo rápidamente al veterinario: Algunos síntomas que pueden padecer los gatos al ingerir un medicamento tóxico para ellos son:
- Vómitos
- Convulsiones
- Diarreas
- Hemorragias
- Pérdida de apetito
- Desubicación
- No quiere jugar
Medicamentos prohibidos para los gatos
Los gatos no pueden metabolizar algunos medicamentos y vitaminas por eso es de vital importancia conocer cuáles son. En el caso de de ingerirlos pueden desarrollar una intoxicación. Descubre que medicamentos no se deben dar a un gato bajo ningún concepto :
El paracetamol
Este antinflamatorio y antifebril muy usado en personas no puede dársele a un gato. Para un felino adulto, una pastilla de este medicamento puede acarrear consecuencias fatales. Esto ocurre así, porque el paracentamol daña el hígado y produce depresión, una respiración rápida, las mucosas se pueden poner de un color azulado e incluso puede ocasionar la muerte de la mascota en el peor de los casos. Se puede llamar también: TYLENOL, PANADOL, PERCOCET entre otro, por lo que hay que prestar mucha atención al prospecto.
La aspirina
Sin duda este analgésico debe mantenerse fuera del alcance de los gatos en todo momento. Es un arma mortal que primero estimula una respiración rápida y después puede producir vómitos (a veces incluso con sangre), baja temperatura, anorexia, orina con sangre (debido al fallo renal que produce este medicamento en el organismo de los gatos). La diferencia cuando la toma una persona a la mascota es abismal, pues un humano tarda 4 horas en eliminarla y en los gatos lleva unas 72 horas para ser eliminado el medicamento.
Otros Antiinflamatorios
Los AINES, son antiinflamatorios que se usan en las personas ,y alguna en veterinaria pero en dosis adecuadas para mantener la seguridad de las mascotas. El Naproxeno o Ketopreno tampoco se les puede dar a los gatos. Además, hay que prestar atención y tener en cuenta que los signos de intoxicación varían con las dosis y la edad. Otros medicamentos que son altamente peligrosos para los gatos son las pastillas para dormir, medicamentos antidiabéticos, para el colesterol, la presión arterial y las hormonas tiroideas.
La Vitamina A
A pesar de que que esta vitamina está presente en diversos complejos vitamínicos o fuentes de alimento, debe ser suministrada correctamente y en dosis pequeñas porque su consumo en exceso puede llevar a a la mascota a sufrir un cuadro de intoxicación y se puede comenzar a encontrar mal. Un aumento de vitamina A en la dieta de los felinos puede provocar somnolencia, pérdida de apetito, posición de sentado con los brazos elevados, tumbado pero sosteniendo su peso sobre las extremidades, rigidez en el cuello o articulaciones, pérdida de peso y extreñimiento entre otros de algunos síntomas. Si es cogida a tiempo esta dolencia, el veterinario marcará unas pautas para corregir el problema cambiando su alimentación. Es por eso que es muy importante controlar la comida de los gatos.
Vitamina D
Al igual que en el ejemplo anterior, la vitamina D se localiza en diversos complejos vitamínicos, y que de manera controlada no producirá ninguna alteración en los felinos, pero cuando tienen un exceso de vitamina D puede ser muy perjudicial para su salud. Los síntomas más comunes son los vómitos, hemorragias del aparato digestivo y respiratorio, lesiones renales, aumenta la frecuencia de la orina etc...