Lykoi o gato lobo: conoce todo sobre esta raza de felino

El Lykoi, también conocido como gato lobo, es una raza de felino que procede de Estados Unidos y que, como su nombre indica, tiene un llamativo aspecto de lobo. Aquí te proporcionamos toda la información básica y las particularidades sobre la procedencia, el aspecto y características físicas, el carácter y comportamiento, así como los temas relacionados con la salud, el mantenimiento y los cuidados específicos de esta raza felina, por si tienes o quieres tener un ejemplar de Lykoi o gato lobo como mascota.

Esta raza de gato tiene su origen en EEUU y fue descubierta en 2010, pero aún no es considerada raza oficial

Origen de la raza felina Lykoi

El gato Lyoki es una raza felina muy reciente que tiene Estados Unidos como lugar de origen. Se trata de un gato doméstico tan nuevo que todavía se encuentra en proceso de ser reconocido y establecido como raza oficial, ya que aún hay muy pocos ejemplares, tan solo unas pocas decenas, siendo Norteamérica la zona en la que este felino es más popular desde que se originó a principios de la presente década. Y es que esta raza nació en el año 2010, cuando en muy poco tiempo y en dos camadas diferentes, apareció un ejemplar en Tennessee y otro en Virginia, fruto de una mutación general de un gato de pelo corto, es decir, no tienen relación genética con otras razas, como los Sphynx, que en unos inicios pudieron ser consideradas para explicar sus características físicas.

Este tipo de gato se caracteriza por sus ojos y su pelaje

El hecho de que algún gato presente un rasgo diferenciado es algo que ha venido sucediendo durante décadas dentro de las camadas del gato común de pelo corto. Sin embargo, las cualidades del conocido como gato lobo hicieron que se les empezara a considerar como una nueva raza y, por tanto, se produjo el desarrollo de los mismos como tal, por parte de unos criadores que cuentan con la colaboración de la Universidad de Tennessee para evitar que se produzcan enfermedades genéticas en el proceso. Como veremos en más profundidad en el siguiente apartado, su peculiar aspecto físico hizo que se les bautizara con el nombre que se les conoce: 'Lykoi', una palabra griega que significa lobo.

Características físicas y apariencia del gato lobo

Sobra decir que la referencia al lobo nada tiene que ver con que estos gatos estén emparentados en modo alguno con el animal, de una especie totalmente ajena, sino que tiene que ver con el aspecto de su pelaje y su mirada, que tanto recuerdan a la del licántropo. Nacidos de una gata común de color negro, los dos primeros ejemplares llevaron a sus amos a preocuparse por su extraño aspecto, asociado a la imagen cinematográfica del ficticio hombre lobo por la textura y color de su pelaje, así como a la falta del mismo en zonas como el rostro o las orejas, lo que llevó a los dueños a realizar estudios veterinarios que descartasen enfermedades o relación genética con gatos sin pelo o con pelajes fuera de lo común como el Gato esfinge o el Devon Rex.

l gato lobo tiene el pelo corto, incluso tiene zonas donde no le crece mucho pelo

Descartados los problemas de salud o su parentesco con otras variedades, las peculiaridades pasaron a convertirse en las cualidades físicas normales de este nuevo gato doméstico. Así, como característica principal, el pelaje del gato Lykoi es un pelo corto que, a pesar de parecer duro y áspero, tiene una textura suave. Además, otro rasgo del pelo que contribuye al aspecto lobuno de este felino es su color, que se presenta en un tono ruano, o lo que es lo mismo, un manto con base de color negro o gris con mechones entremezclados en color blanco. Al nacer, los gatos lobo apenas tienen pelo alrededor de los ojos, el hocico, las orejas y la tripa y, aunque lo habitual es vaya apareciendo a medida que crecen, lo cierto es que algunos ejemplares tienen muy poco pelo en estas zonas, que pueden llegar a cubrirse ligera o totalmente, así como quedar despejadas también en su etapa adulta.

El comportamiento de la raza Lyoki es cariñoso y juguetón

Con un cuerpo estilizado y una fina cola, las medidas del Lykoi son las de un gato doméstico normal, es decir el de un felino de tamaño mediano que pesa entre 4 y 7 kilos y cuyo ejemplar macho, como en prácticamente todas las razas, es más grande que la hembra. Respecto a su rostro, esta raza tiene una cabeza triangular y unos rasgos inconfundibles que acentúan su aspecto de lobo: unas grandes orejas, una nariz negra y unos amplios y llamativos ojos de color amarillo intenso que se va acentuando a medida que el felino crece. Por otro lado, a la hora de tenerlo como mascota, hay que tener en cuenta que las características físicas de este gato hacen que se adapte a un clima templado que no sea demasiado frío, ni extremadamente caluroso.

Carácter y comportamiento de la raza Lykoi

Los pocos datos que se tienen de esta nueva raza felina describen a los gatos Lykoi como cualquier otro gato doméstico, es decir, son juguetones y cariñosos. A pesar de que su aspecto salvaje los haga parecer fieros, esto solo se traduce en su instinto cazador y en su tendencia a las travesuras, ya que son gatos muy activos y curiosos. Por otro lado, aunque son algo desconfiados y recelosos con los extraños, también son extremadamente inteligentes y tienen un temperamento muy afectuoso, por lo que no tardan mucho en relacionarse y coger confianza, habiendo llegado a ser comparado con el carácter afable de los perros del que muchas veces se despoja, injustamente y por norma, a los gatos.

Estos gatos tienen los mismos cuidados que cualquier otra raza de felino

Como todo animal doméstico, estos rasgos del carácter se verán acrecentados o disminuidos en función de lo que el gato tenga por costumbre en su día a día desde que nace. Por ello, para su correcta socialización y teniendo en cuenta, que a diferencia de los perros, no se puede llevar a cabo un adiestramiento, será necesario que desde pequeños se les acostumbre a vivir con personas y otras mascotas, si se quiere tener una buena convivencia y armonía entre todos los miembros de la familia. Hasta el momento, al haber surgido como gato doméstico, el comportamiento del Lykoi ha sido siempre el habitual en toda mascota que siempre ha vivido en casa.

Cuidados específicos y salud de este curioso felino

El gato Lykoi no requiere cuidados especiales más allá de los habituales en cualquier otro felino doméstico común. Por lo tanto, bastará con darle una alimentación de calidad, basada en piensos y alimentos húmedos y en relación a su estado general; una actividad y ejercicio que, como en la mayoría de los casos, tampoco será un problema en el caso de esta raza, ya que es un gato bastante activo, curioso e inquieto; así como una revisión regular de los ojos, boca, orejas y uñas, limpiándolos cuando sea necesario y advirtiendo que no tengan daños. En cuanto al cuidado de su pelaje, el pelo corto del gato lobo requiere un cepillado normal, dos veces a la semana normalmente y todos los días cuando el felino esté mudando. Del mismo modo, los baños no son necesarios - ya que se limpian ellos solos - y en el caso de ser inevitable porque se haya manchado en excesos, siempre habrá que utilizar un champú especial para gatos, preferiblemente de lavado en seco, así como otros productos específicos como toallitas.

PDebido a que su descubrimiento es muy reciente, no se conocen enfermedades concretas asociadas con los gatos lykoi

Respecto a la salud del gato Lykoi, su breve existencia hace que no se conozcan enfermedades concretas asociadas a la raza, más allá de las dolencias típicas y comunes a cualquier otro gato doméstico, motivo por el cual se le presume una esperanza similar a los mismos, pudiendo llegar hasta los 20 años de vida. Por otra parte, si atendemos a los estudios veterinarios realizados al inicio de su existencia para descartar las posibles enfermedades genéticas que pudiesen explicar su aspecto, podemos decir que el gato lobo cuenta con una salud de hierro sin ninguna afección específica de la raza. De todos modos, para que esto sea así y prevenir cualquier enfermedad futura, es imprescindible llevar un seguimiento de las vacunas, una correcta desparasitación, así como visitas periódicas al veterinario, tanto para hacer revisiones cada año, como cada vez que se observe alguna anomalía en la mascota.