Con la llegada del invierno es normal que pensemos en hacer alguna actividad al aire libre con nuestra mascota como llevarlos al campo o incluso a la montaña, sin embargo, debemos tener en cuenta que no todos los perros tienen la misma genética y aunque algunas razas como los Husky o los Labradores sean capaces de soportar temperaturas muy bajas, hay otros que no son capaces por su complexión física.
Cuando un perro está expuesto al frío durante un largo período de tiempo la temperatura de su cuerpo puede decaer llevándolo a sufrir lo que se conoce como hipotermia. Esto puede causarles problemas de salud muy peligrosos y fatales. Es por esto por lo que cuando nuestra mascota comience a presentar síntomas de hipotermia debemos reaccionar lo más rápido que podamos.
¿Qué es la hipotermia en perros?
La hipotermia es un bajón de temperatura corporal anormal que pueden sufrir tanto personas como animales. Se caracteriza por tener tres fases: hipotermia leve, moderada y severa. La temperatura corporal de los perros es superior a la de nosotros, en torno a unos 38ºC en condiciones normales. Cuando la temperatura rectal de nuestra mascota está en 32ºC se considera hipotermia leve, mientras que si esta desciende a 28ºC o menos se considera hipotermia severa.
La hipotermia en perros sucede cuando el cuerpo de nuestra mascota es incapaz de mantener su propia temperatura normal alterando el sistema nervioso del animal. Esto es algo muy peligroso ya que puede afectar al corazón, al flujo sanguíneo, a la respiración y al sistema inmunológico. En los casos más graves en los que no tratemos a nuestra mascota, la hipotermia puede causarles el coma y muerte.
¿Qué causa la hipotermia en perros?
Los motivos por los que un perro puede sufrir hipotermia son varios, desde los más comunes que son exponerle al frío durante muchas horas, que tengan el pelaje y la piel húmeda o que hayan estado en agua fría durante mucho tiempo, hasta los menos comunes como que el animal sufra una conmoción cerebral o le hayan administrado anestesia durante mucho tiempo.
Los perros que más propensos son de tener hipotermia son aquellos perros tipo toy, perros con el pelo corto, los ancianos y los cachorros recién nacidos. Esto se debe a que esta clase de animales pierden mucho calor corporal porque su pelaje o piel no consiguen absorber el calor que necesitan para estar expuestos a esas temperaturas. Así mismo, especialmente a los cachorros les cuesta mantenerse caliente porque tienen menos grasa almacenada.
Síntomas de hipotermia
La primera señal de que nuestra mascota puede tener hipotermia son los temblores fuertes, repetitivos e incesantes. Cuando a nuestra mascota la sacamos a la calle es normal que, en el invierno debido al contraste de temperatura de nuestra casa a la calle, comiencen a temblar, sin embargo, ese temblor debería desaparecer una vez que comiencen a caminar y vayan entrando en calor, si esto no es así es probable que necesite un abrigo o alguna prenda que les proteja del frío sino queremos que le ocurra algo grave.
Continuando con los síntomas que puede presentar nuestra mascota, si queremos comprobar si está sufriendo de hipotermia deberemos comprobar su temperatura corporal, si esta es menor a 35 ºC sabremos que algo no va bien, así mismo puedes comprobar el pulso también tocando la parte interior media del muslo, los perros que sufren de hipotermia tendrán un pulso débil.
Otros de los síntomas son falta de apetito, congelación de ciertas partes de su cuerpo como orejas o coja, y por último fallo cardíaco e incluso coma si no se atiende al animal.
Cómo actuar en caso de hipotermia
Es de vital importancia que si vemos que nuestra mascota tiene alguno de los síntomas ya mencionado actuemos de la manera más rápida posible siguiendo estos pasos:
- Dale calor a tu mascota envolviéndolo con una manta o prenda que le pueda aportar calor.
- Pon a tu mascota en un lugar cálido y sécalo en caso de que esté mojado.
- Mide su temperatura rectal con un termómetro, si esta es inferior a 35ºC deberás llevar a tu mascota de forma inmediata al veterinario e ir midiendo cada 10 minutos su temperatura.
- Para subir su temperatura corporal y evitar que le dé una bajada de azúcar, deberás administrarle una solución de agua con azúcar o de miel disuelta en agua caliente.
- Para darle más calor coloca botellas de agua caliente (sin que quemen al animal) envueltas en toallas en el pecho y las axilas de tu mascota. Cuando vayan perdiendo calor ve cambiando las botellas.
- En caso de parada cardíaca realiza una maniobra de reanimación cardiopulmonar (CPR). Para esto deberás tumbar a tu perro de costado y realizarle 2 respiraciones sobre su boca seguidas de 30 compresiones sobre la última costilla por minuto hasta que empiece a respirar.