El Husky Siberiano y el Alaskan Malamute son dos razas de perro nórdicos que se han utilizado a lo largo del tiempo para el trabajo en la nieve, debido a su gran resistencia al frío y su fuerza. Y aunque cuenten con un aspecto bastante similar, estas dos razas cuentan con claras diferencias, y ya no solo diferencias físicas, sino también existen diferencias en cuanto a su carácter. Además, muchas personas se piensan por su gran parecido que son la misma raza, ya que poca gente conoce a la raza llamada Alaskan Malamute.
El origen del Husky Siberiano y Alaskan Malamute
El malamute de Alaska o Alaskan Malamute tiene sus orígenes en la Alaska Occidental, apareciendo por primera vez a finales del siglo XIX. Esta raza fue criada por una tribu de la zona llamada Inuit. El Malamute de Alaska era considerado imprescindible para la supervivencia de la tribu ya que su gran resistencia al frío y su fuerza hacían de esta raza un miembro muy valioso para la tribu. Sus grandes cualidades como perro trineo y su naturaleza obediente hicieron de esta raza que fuera determinante para poder ayudar a la gente a desplazarse y transportar alimentos a determinados lugares.
Además, el Alaskan Malamute contaba con grandes habilidades para la caza mayor. No fue hasta la época de la fiebre del oro en Alaska cuando la gente comenzó a descubrir a esta raza. Fue a partir de ese momento cuanto el Alaskan Malamute se fue extendiendo a lo largo y ancho de Estados Unidos.
En cambio, se desconoce por completo cuando surgió el Husky Siberiano. Lo único que se ha descubierto con el paso de los años que es una de las razas que data con varios siglos de antigüedad. El Husky fue criado por la tribu Chuckchi en una de las muchas zonas frías y despobladas de Siberia, donde vivía esta tribu. Durante muchos siglos esta raza se utilizó para cazar, conseguir alimento y transportarlo hasta el campamento. Además, este perro no se utilizaba para transportar cargas muy pesadas, sino se buscaba que el perro pudiera soportar grandes recorridos bajo el frío. El Husky Siberiano era un miembro más de las familias, por lo que dormía junto a sus dueños.
Las diferencias físicas entre ambas razas
Dejando a un lado que el origen de ambos es en ubicaciones lejanas. Estas dos razas cuentan con grandes diferencias por su aspecto físico. Para empezar, se puede observar como existe una clara diferencia en cuanto al peso y tamaño que hay entre estos dos caninos. El Husky es un perro más fino y ligero, además de ser algo más pequeño, mientras que el malamute es más grande y es más robusto. El Husky Siberiano puede pesar entre 15 y 30 kg, mientras que el Alaskan Malamute pesa entre 34 y 38 kg. Y debido a sus diferencias peso y estatura, el Husky Siberiano se caracteriza por tener mayor velocidad, mientras que el Malamute se caracteriza por tener más fuerza.
Y ya no solo se pueden diferenciar por su peso y tamaño, con solo verles la forma de sus caras se puede apreciar diferencias. El rostro del Husky Siberiano es mucho más fino que el del Alaskan Malamute. Además, las orejas también delatan a cada uno de estos ejemplares. Los dos cuentan con orejas medianas, pero se puede apreciar que en el caso de las orejas del Husky son más grandes que las del malamute.
Pero eso no es todo, y aunque muchas personas caigan en la trampa de creer que son dos perros iguales ya que tienen la cara blanca y con una línea vertical oscura o con una máscara. Una peculiaridad característica del Husky Siberiano es desarrollar heterocromía, una condición genética que provoca que puedan tener un ojo de cada color. También puede tenerlos pardos o azules. Mientras que en el caso del Malamute, solo los tendrá de color castaño.
Además, el Husky Siberiano y el Alaskan Malamute cuentan con pelajes distintos. Lo que si es cierto es que ambos poseen una doble capa de pelo, pero la capa exterior del Husky es más suave y más corto que el del Malamute de Alaska. Y eso no es todo, el Alaskan Malamute puede llegar a tener hasta 9 colores diferentes, mientras que el Husky solo puede llegar a 5 colores.
¿Cómo son de carácter?
Uno de los puntos más positivos del Husky Siberiano es su temperamento. Los Huskies son una raza canina inteligente e independiente, además de ser muy afectuosos con las personas. Es una raza canina que no destaca por su agresividad y se adapta muy bien a los hogares que tengan otros perros u otras mascotas. También son unos perros que cuidarán bien de los niños e incluso recibirán bien a los invitados al hogar.
Sin embargo, el Husky Siberiano al tener una actitud tan independiente, será difícil de entrenar, por lo que será complicado dominar a los Huskies en un principio. Por lo que este perro nórdico será mejor para los dueños que cuenten con experiencia y que sepan establecer las reglas para que el perro sea bien educado.
Aunque el Alaskan Malamute no se queda atrás, incluso puede llegar a ser más cariñoso y dulce que el Husky Siberiano. El Alaskan Malamute es un perro tranquilo y que cuenta también con un carácter independiente, pero es menos impetuoso que el Husky Siberiano. Es un perro obediente, fiel y familiar, pero que también necesitará de una buena educación desde una edad muy temprana si no se quiere que el perro no obedezca a las órdenes.
Además, el Malamute es un perro que se caracteriza por ser muy activo y juguetón, por lo que su relación con los niños será estupenda. Aunque es cierto que debido a no es nada agresivo, no será un buen perro guardián. Y una vez en el hogar, habrá que hacer que aprenda a socializar y a mejorar su relación o convivencia con otros perros o mascotas del hogar, ya que tiene un instinto alto de jerarquía.