Un gato puede ser una mascota adecuada para mucha gente; lo puedes tener en un piso y aunque están mejor si tienen la compañía de otro gato pueden ser felices aunque pasen varias horas solos al día.
Los gatos pertenecientes a la raza Cornish Rex tienen un aspecto de lo más particular. Te contamos todo lo que necesitas saber para reconocerlo por sus peculiaridades físicas, qué tipo de cuidados requieren y cómo es su comportamiento en casa. Seguro que este felino acaba conquistándote.
Esta raza nació en 1950 en Cornwall (Inglaterra) como fruto de una mutación genética que se produjo de forma natural por el cruce de dos gatos comunes de pelo corto. Es decir, el Cornish Rex no ha sido creado por el hombre. También recibe el nombre de Killibunker, como el primer gatito de esta raza que se conoce.
Sin embargo, una década después los Cornish Rex originales se cruzaron con los gatos siameses y como consecuencia la forma de su cuerpo se transformó. Adquirió un aspecto mucho más estilizado que ha hecho que se parezca más a los galgos. Su apariencia física puede resultar un tanto chocante para alguien 'novato' en el mundo de los felinos pero tiene un carácter cariñoso y es muy fácil de cuida r aunque requiere de una mano firme a la hora de educarlos cuando son cachorros. Por eso, tiene cada vez más fans incondicionales.
Así son los Killibunker
Los Cornish Rex son gatos de tamaño mediano. Su cráneo tiene forma triangular, ya que presenta una forma plana en la parte superior, alargado y con un perfil recto gracias a una la nariz larga. Tiene las orejas de mayor tamaño que los gatos comunes y sus puntas son redondeadas.
Los ojos son rasgados, de forma ovalada e inclinados y suelen ser de un color similar al de su pelaje. Su esqueleto es muy fino y ligero lo que le da ese aspecto tan estilizado que recuerda inevitablemente a los galgos porque tienen la misma forma en el abdomen. Son fuertes y sus músculos suelen estar bien desarrollados, pero presentan una espalda con forma de arco.
Los Cornish Rex tienen una cola larga y fina terminada en punta y cubierta de pelo rizado. Pero su rasgo más característico es el pelaje: corto y ondulado por todo el cuerpo. De ahí su segundo nombre 'Rex' que también reciben otras razas con esta clase de pelo (los Devon Rex, los German Rex y los Selkirk Rex). Además, los bigotes y las cejas también son rizados y de tamaño medio. Sus patas son largas y delgadas y puede presentar todo tipo de colores y manchas en su pelaje.
Esta raza de gato tiene una clara ventaja con respecto a otros felinos. Tienen el pelo corto y el que pierden es escaso. Pero no solo eso, además, tiene muy poca cantidad de la proteína que causa la mayoría de las alergias, así que puede ser una buena solución para aquellas personas con alergias leves que quieren tener una mascota.
Un gato muy sociable
Este tipo de gato es más cariñoso que otros felinos. Tiene un carácter muy sociable, es casero y disfruta jugando con niños. Esto no quiere decir que no sea una mascota independiente pero suele relacionarse con sus dueños de manera afable. Es un felino alegre y no suele ser miedoso si le estimula adecuadamente.
Son grandes escaladores y pueden saltar muy alto gracias a su tamaño, su fuerte musculatura y sus patas finas y largas. En general, se puede decir que son unos compañeros de juegos incansables. Les gustan los lugares tranquilos y cómodos en los que puedan estar calentitos, pero se pueden adaptar a cualquier espacio.
Ten en cuenta que este tipo de gato se caracteriza por su gran variedad de vocalizaciones. Maúlla de muchas formas y hace toda clase de ruidos. Si no le educas bien desde que es un cachorro este rasgo puede convertirse en algo molesto. Intentará llamar la atención e incluso hacerse el dueño y señor de tu casa si se lo permites gracias a sus constantes quejidos.
Cuidados al alcance de todos
Pero tenerlo como mascota es más fácil de lo que puede parecer. No requiere unos cuidados demasiado específicos. Si te decides a adoptar uno tan solo tendrás que retirarles el pelo muerto de vez en cuando (basta con que lo hagas una vez por semana).
Para ello, pasa un guante de franela por todo su cuerpo y conseguirás que brille más. Aunque normalmente no hace falta bañar a los gatos muy a menudo es recomendable que le acostumbres a recibir un baño de vez en cuando, porque su pelaje puede ser algo grasiento. Recuerda que debes utilizar un champú especialmente indicado para este problema. No hace falta cortarles el pelo. Fíjate en que sus orejas, uñas, dientes y cola estén siempre bien limpias.
Fuertes y sanos
Al igual que con cualquier otra mascota habrá que llevarle al veterinario siempre que el animal lo necesite. Y no te olvides de tener al día sus vacunas y acudir a las revisiones rutinarias. Es un felino que tiene una tendencia natural a la obesidad, así que tendrás que poner especial cuidado en que lleve una alimentación adecuada, sobre todo cuando llegan a la edad adulta, ya que su apetito aumenta en este momento.
Su temperatura corporal es elevada y durante los primeros años de vida esto puede provocarles algún que otro catarro. Tendrás que poner atención porque no puede protegerse del frio por sí mismo al carecer de pelo de guarda.
Si estás pensado en tener un Cornish Rex...
Nuestra primera recomendación es que busques uno en los refugios de animales. Adoptar un animal abandonado es siempre mejor que comprarl o. Pero si no encontráis ninguno, y os decidís a comprar debéis tener en cuenta algunas consideraciones antes de llevaros a casa a vuestro nuevo amigo.
¿Has encontrado un criador en Internet? Asegúrate de que conoce la raza en profundidad y que te da garantías. Deberá resolver todas las dudas que le plantees acerca de su cuidado y ofrecerse a hacer un seguimiento de los primeros meses de vida del cachorro. Puede darse el caso de que presente anomalías genéticas o problemas de salud de cualquier tipo.