Los animales son muy parecidos a las personas por lo que hay que tener especial consideración ya que ellos no se pueden expresar con palabras y en periodos que se salen de la rutina pueden sentirse vulnerables y algo estresados. Para ello se pueden seguir una serie de pautas para que se adapten a las nuevas situaciones de la manera más saludable posible y sin que les afecte tanto.
Para aquellas personas que tengan un animal doméstico que le puedan pasear como a un perro,eso no les quita el estrés, tan solo lo puede reducir pero eliminar no. Por lo que no es algo milagroso y hay que evitar salir por lugares donde los bares estén a rebosar de gente ya que eso podría empeorarlo aún más. Además, hay que evitar esas aglomeraciones porque pueden tirar petardos y eso si les asusta realmente y pueden sentir mucho miedo, por lo que a la hora de pasearlos es mejor ir a un lugar tranquilo donde puedan correr libremente y no haya muchas personas.
Lugares tranquilos para tu mascota
Una de las cosas fundamentales para aquellos amantes de los animales y por consiguiente convivan con ellos es la de separar espacios ya que las comidas y cenas de Navidad reúnen a gran parte de la familia y se forma bastante alboroto. Para ello es esencial cambiar del salón si es que se tiene ahí la jaula o camita del animal a una habitación más silenciosa donde nadie pueda molestarle.
De esta manera la mascota tendrá su espacio y se mantendrá tranquilo lejos del estrés y del ruido. Es esencial ir a visitarlo ya que puede sentir miedo y sentirse solo. También se le pueden llevar algunas golosinas para que se ponga feliz y se vaya relajando poco a poco. Si se escuchan petardos, hay que ir inmediatamente donde esté la mascota para que se relajen y no estén solos en esos momentos tan desagradables.
Adiós estrés navideños para las mascotas que tienen que viajar
En el caso de que se viaje a otros lugares para pasar la Navidad y el viaje sea largo es esencial hacer paradas para alimentar al animal y que beba agua. De esta manera llegará mucho más relajado al destino y no tan inquieto y nervioso. Para evitar el nerviosismo de las mascotas en concreto la de los gatos y perros hay que evitar proporcionarles comida que haya en la mesa, ya que en estas fechas hay un sinfín de platos en la mesa y la mascota se puede ver atraído más de la cuenta para poder comer esos manjares. Es esencial no darles nada ya que les puede poner más nervioso.
En el caso de que ellos no reciban nada, se cansarán y se irán a dormir o a otro lugar y por consiguiente se relajarán. Si por el contrario se les da comida siempre estarán inquietos esperando otro pedacito. También se ha de tener en cuenta los adornos navideños ya que las mascotas pueden verse atraídas por ellos y puede haber algún percance, por consiguiente hay que mantenerles lejos de este tipo de decoraciones.
Cuidado con los disfraces para mascotas
Ya sabemos lo adorables que están cuando se les disfraza, a pesar de que en alguna ocasión se dejen disfrazar hay que tener en cuenta que son animales y no hablan por lo que es mejor dejarlos tranquilos para así evitar que el estrés aumente y se pongan más nerviosos. También hay que evitar que estén mucho con los niños, es decir está bien que se diviertan durante un rato pero nada más ya que esto si que les podría alterar de manera considerable. Es mejor dejarles tranquilos, así el estrés irá desapareciendo poco a poco.
Rutina habitual de tu mascota
Una de las cosas para evitar el estrés que es de las más sencillas es seguir con la rutina de la mascota a pesar de que sean fechas navideñas. De esta manera el animal sentirá que es un día más y no le provocará ningún tipo de estrés. Hay que procurar evitar variar el horario de las salidas y de las comidas ya que eso es un factor por el cual se pueden llegar a estresar con más facilidad.
No obstante, se puede prevenir el estrés de Navidad o cualquier época del año. Se puede dar un tratamiento preventivo con vitamina B o triptófano. Son elementos que ayudan a sintetizar la serotonina algo que elimina la ansiedad del cerebro por lo que puede ser una buena idea. Siempre es recomendable asistir a un veterinario para que estudie el caso de la mascota y así llevar a cabo el mejor tratamiento.
En definitiva hay que evitar el cambio de rutina y si es inevitable evitar a toda costa las aglomeraciones de personas y que la familia esté muy encima del animal porque esas son las causas principales de que el animal se estrese, además de los cambios de horario.