Seguro que nunca te habías planteado que se puede pasear mal a un perro. Aparentemente, es algo que vemos como una tarea muy sencilla, pero no es así. Pasear adecuadamente a tu perro es muy fácil siempre y cuando sepas cómo hacerlo, si no, te verás sometido a adelantamientos, tirones, tensión en la correa y un montón de problemas más que pueden convertir un aparente paseo de desconexión en todo un desastre.
Lo más importante es que enseñes a tu perro a pasear junto a ti, independientemente de si es una mascota adulta como un cachorro. Los perros simplemente caminan y no saben si lo hacen bien o mal, así que eres tú, su dueño, el que debe mostrarles cómo se hace, el que debe felicitarlos o corregirlos. Y es que la mayoría de los problemas de conducta de las mascotas se debe a una pésima comunicación entre el dueño y el perro.
Si tu mascota es aún un cachorro, procura vacunarla antes de salir a la calle y acostúmbralo a llevar el collar puesto todo el día sin que lo vea como un problema sobre el cuello. Conforme crezca, el perro se irá acostumbrando y se lo podrás quitar en casa. Ten en cuenta que, al fin y al cabo, los perros crecen muy rápido, por lo que debes vigilar que el collar no le apriete. Lo mejor para saber cuándo un collar está bien apretado es cuando puedas meter un par de dedos sin problema entre el cuello del cachorro y la correa.
A continuación vamos a ver cómo dar un paseo a nuestro cachorro para que pasee junto a nosotros tranquilamente y no se lleve ningún sobresalto. Tan solo es cuestión de mucha paciencia y práctica para tener unos buenos resultados.
Agota todas las energías de tu mascota
El objetivo principal es que tu perro se desfogue. Cuando un cachorro sale a la calle, lo primero que está loco por hacer es jugar, correr, saludar a otros perros, orinar, etc. Todo esto es normal, por eso cuando salen a pasear están tan llenos de energía y vitalidad. Así que es recomendable que tu perro libere toda esa energía antes de ponerte a enseñarle cómo pasear para conseguir que esté dispuesto aprender y sea mucho más sumiso. No olvides que es tu responsabilidad es llevar bolsitas de plástico para recoger la caca de tu perro y mantener todo limpio.
Al principio, puedes llevarlo específicamente a un parque para perros para que pueda cansarse, pero tampoco hay que tener prisa porque tu perro se agote. Él mismo tiene que hacerlo de una forma natural en un periodo de tiempo de entre una media hora y una hora para que disfrute sin interrupciones y a su libre albedrío. Ahora sí, una vez que tu mascota ya ha jugado, ha hecho sus necesidades y se ha liberado, puedes pasar a enseñarle todo lo que te habías propuesto.
Elegir un lugar apropiado de entrenamiento
El lugar donde nuestro perro va a ser entrenado es muy importante. Debe ser un sitio tranquilo, donde no se pueda distraer con facilidad y donde no tenga a la vista muchos estímulos. Si lo llevas a un parque con niños pequeños jugando, gritos o balones, no aprenderá nada porque se distraerá. Esto solo es al principio, es decir, cuando tu perro ya tenga una base o una formación básica, entonces podrá visitar nuevos lugares. Una buena opción es un parque por el que pase poca gente o un camino de campo poco transitado.
La preparación del dueño/a también importa
De nada sirve que tu perro haya liberado toda su energía si su dueño no está relajado. Y es que los seres humanos somos capaces de trasmitir de forma indirecta nuestros problemas a nuestra mascota. De esta forma, un dueño que esté mal, tenso, estresado, trasmitirá esa energía negativa a su perro. Para conseguir adiestrar adecuadamente es importante tener muchas ganas también de enseñarle y nada de prisas. La constancia hará del paseo un momento agradable y ayudara a mejorar el vínculo entre ambos.
Como hemos dicho antes, el cachorro debe estar ya acostumbrado a llevar el collar puesto, por lo que el siguiente paso es ponerle la correa. Al principio es importante que le pongas una correa corta para llevarlo a pasear, más o menos de un metro. Sin embargo, las correas extensibles no sirven. Una vez la correa puesta, se procederá a comenzar con la enseñanza.
Empezando a pasear
Ponle a tu mascota la correa y elige el lado en el que deseas que tu perro camine. La coherencia es importante al entrenar a tu perro y elegir un lado donde el perro caminará hará que establezca su lugar en la actividad. Ahora sí, comienza a caminar. Procura hacerlo de una forma media, es decir, ni muy deprisa ni muy despacio. La correa debe ir sin tensión y colgando por la mitad para que no esté tensa. Si ves que tu cachorro se adelanta y pone la correa en tensión, para en seco. Cuando el perro se dé la vuelta y vaya hacia ti, vuelve a reanudar la marcha. Esta lección hay que repetirla todos los días para que se le quede bien grabado a tu mascota que cuando ella tira, no avanza.
Si ves que no te hace caso y no para de adelantarte y dar tirones, da un giro de 180º y camina en el sentido contrario en lugar de parar en seco y esperar a que la correa se destense. Repite este paso las veces que lo consideres necesario hasta que el perro te haga caso y gire contigo a la vez que lo hagas tú.
Premiar cuando lo haga bien
Si esto tampoco te funciona porque tu cachorro tira con mucha fuerza y no te hace caso, coge algo que tu mascota considere como premio, ya sea un trozo de salchicha o una croqueta de pienso, para que se coloque a tu lado y camine junto a ti. Cuando lo haga correctamente, dale el premio y ponte otro premio en la mano. Cuando haya caminado bien tres o cuatro metros, dale otro premio de nuevo, y así repetidamente de forma que camine a tu lado.
La importancia de la velocidad en el entrenamiento
Debes caminar recto y variar el ritmo, es decir, camina deprisa durante unos minutos sin dejar que tu perro te adelante y después camina lento para ver si sigue estando a tu lado. Si ves que te adelanta, para en seco. Si por el contrario, tu perro se queda atrás, solo tienes que bajar el ritmo y tener el premio en mano para que vaya a tu lado. Recuerda como norma general que la correa debe ir siempre sin tensión.
Es importante que le hables a tu perro porque entiende el tono de tu voz. Anímale con frases positivas como "Buen trabajo" o "Así se hace" cuando haga algo bien. Emplea una voz severa cuando le digas que no haga las cosas que están mal, como ladrar a las personas que pasan o gruñir a otros perros.
Invertir tiempo en el aprendizaje de tu perro es importante
Debes tener en cuenta que enseñar a tu perro a pasear adecuadamente no se consigue ni siquiera en un mes. Sí que pueden existir progresos de forma constante, pero la paciencia es un punto clave, al igual que repetir los pasos indicados anteriormente diariamente durante un periodo de tiempo considerable. También es cierto que al igual que unos perros tardan un mes en aprender a pasear, hay otros que tardan medio año, pero lo verdaderamente importante es disfrutar el proceso, no el tiempo que tarda ni tu propio tiempo porque también vas a tener que invertir muchas horas en tu mascota para conseguir una mayor comodidad futura. Además, pasear a tu perro todos los días sirve para proporcionarle ejercicio físico y librarle del estrés.
Una vez que tu perro sepa pasear más o menos bien será el momento de poder pasear con otros amigos que también tengan cachorros para enseñarle a tu perro que además de jugar, también se puede pasear juntos. Y es que al principio, algunos perros tienen la costumbre de ladrar a otros perros mientras están paseando. Normalmente, este comportamiento se produce como resultado de falta de ejercicio en el perro.
Consejos prácticos para el paseo
- Nunca comiences una clase con un perro lleno de energía porque no servirá de nada.
- Intenta no enseñar a tu perro en días de mucho calor porque el animal solo querrá estar a la sombra y no te hará caso.
- Nunca le pongas a tu perro un collar castigo, de estrangulación o correas anti-tirones porque harán que se tome el paseo como un castigo. Todos los perros pueden aprender a pasear con un collar normal y una correa de tamaño medio.
- Tu estado de ánimo es imprescindible. Si tú actitud no es positiva y no estás calmado, no intentes enseñar ese día a tu cachorro.
- Si ves que tu perro está muy alterado, intenta relajarlo de forma natural antes de comenzar la práctica. Siéntalo o túmbalo, acaríciale y dale un masaje.
- Adiestrar a un perro para que pasee correctamente no es cosa de niños ni de personas con inexperiencia, solo el dueño o el adiestrador podrán hacerlo.
- El único truco es la paciencia y la constancia, por lo que si la situación te sobrepasa, lo mejor es que acudas a un adiestrador canino. Aun así, aunque hayas necesitado la ayuda de una persona cualificada, es importantísimo que siempre estés presente en el adiestramiento.