Los perros, como cualquier otro ser, están expuestos a sufrir heridas, especialmente si son algo inquietos. Aunque a veces puede tratarse de meros accidentes, también puede haber algún contratiempo si existe contacto entre dos canes, por ejemplo, si conviven juntos o si alguno de ellos despierta un comportamiento agresivo en un encuentro durante un paseo. Por ello hay que prestar especial atención a aquellos animales que de por sí tengan conductas difíciles, pero no es menos importante que sus dueños sepan cómo actuar y cómo ofrecerle ayuda sanitaria en cualquier situación de emergencia.
Desinfección de heridas en un perro
Si tu perro sufre algún corte superficial quizá no sea necesario acudir al veterinario ya que tú mismo podrás ayudarle. El procedimiento es sencillo si la herida no es de gravedad: primero has de limpiar la zona afectada con suero fisiológico y una gasa antiséptica, sin ejercer presión sobre la herida. Si el pelo de tu mascota es demasiado largo o si crees que puede afectar a la cicatrización y, consecuentemente, infectar aún más el corte, se recomienda que le cortes el pelo de alrededor.
En algunos casos no se suele indicar el alcohol como desinfectante dado que el escozor podría hacer enfadar a tu mascota y hacer difícil la cura. Asimismo, tampoco se debe usar algodón en la desinfección de heridas porque sus fibras se quedan enganchadas en la piel y contribuyen a la infección de la cicatriz. Por otro lado, si la herida del animal no ha sido revisada por ningún veterinario, también se puede emplear agua. Después de la limpieza, aplícale yodo diluido en agua para favorecer la cicatrización de la herida y si dispones de alguna pomada indicada para la regeneración de la piel en perros, puedes ponérsela en la zona siempre y cuando el especialista se la haya recomendado en ocasiones anteriores.
Cómo curar abcesos en perros
La acumulación de pus en una zona determinada es muy común en las infecciones de los perros por cortes o arañazos, aunque también pueden aparecer de forma natural. Si detectas algún pequeño absceso en tu mascota, aunque lo ideal sería que acudieras con ella al veterinario, lo principal es eliminar la bolsa de pus. Los veterinarios suelen pinchar el bulto para que drene pero la actuación más recomendada para los dueños es aplicar agua con sal con una gasa sobre la zona para que la bolsa explote por sí sola. También se puede aplicar con un algodón o bastoncillo de oídos un baño de manzanilla caliente para ablandar la zona.
Para bultos más grandes, no pongas en riesgo la salud de tu mascota y deja que un experto le trate porque en muchas ocasiones se puede llegar a necesitar de cirugía para eliminarlos por completo. No obstante, una vez se haya abierto el absceso, puedes curar a tu animal de compañía con clorhexidina unas dos veces al día, así como se puede aplicar alguna crema antibiótica para evitar que la zona pueda volver a infectarse.
Cómo curar hemorragias en perros
Si tu perro sufre alguna hemorragia externa por la que no deja de sangrar abundantemente, lo más importante será que intentes frenar el flujo de sangre hasta que puedas llevarle al veterinario de manera urgente. Primero has de intentar juntar los bordes de la herida con los dedos y ejercer presión en ella con una gasa antiséptica.
Cuando veas que esa gasa ya no absorbe más sangre, no la levantes bajo ningún concepto y pon una nueva sobre ella, lo importante es que no dejes de ejercer presión sobre la hemorragia. Repite la acción tantas veces como sea necesario hasta que veas que el flujo de sangre empieza a disminuir y después fija las gasas empleadas al cuerpo del perro con una venda. Una vez acudas al veterinario, probablemente le den puntos a tu mascota y te enseñen los cuidados a seguir, pero deberás curar y desinfectar la herida en casa como se ha indicado en el apartado anterior.
Consejos para curar heridas en perros
El principal consejo es que no cunda el nerviosismo para no transmitírselo al animal, pero también os dejamos las siguientes recomendaciones a tener en cuenta a la hora de hacer curas en perros:
- Deberás calmar al animal con mimos y un tono de voz dulce para tranquilizarle. También es importante que limpies tus manos y los utensilios que vayas a emplear para manipular al animal.
- Si la herida del perro esta muy próxima a zonas delicadas, como pueden ser los ojos, la nariz, las orejas, las almohadillas o las partes genitales, evita usar el alcohol ya que puede irritar los órganos del animal.
- Conviene que la herida seque al aire libre, aunque a veces será inevitable proteger la zona con una venda, por ejemplo, si tu perro ha sufrido un corte en alguna almohadilla.
- Los perros no toleran los mismos medicamentos y pomadas que los seres humanos así que no le mediques sin prescripción de un veterinario, solo emplea productos que anteriormente ya se le hayan recomendado.
- Siempre es eficaz tener preparado un kit de primeros auxilios que contenga gasas antisépticas, yodo, suero fisológico, alcohol, agua oxigenada, vendas y cintas adhesivas y tijeras de punta redonda.
- Se recomienda colocar un bozal al perro durante la cura para evitar que responda mordiendo, así como también se le debería poner un collar isabelino para evitar que se toque la herida.
- Si tu mascota es un perro de fuerte carácter, puede ser que se necesite de la ayuda de una segunda persona, incluso de una tercera si el animal es de grandes dimensiones.
Remedios caseros para curar heridas en perros
Así como empleamos remedios naturales para curar heridas en los seres humanos, también existen algunos para los canes. De hecho, se trata de remedios muy parecidos, como es la miel con azúcar, dos alimentos característicos por sus propiedades antibacterianas y antiinflamatorias. Asimismo, se puede emplear aloe vera puro por su capacidad de calmar y regenerar la piel y para conseguir estos mismos efectos se recomienda elaborar una crema de caléndula con aceite de oliva, también muy eficaz en la cicatrización de heridas.