Cómo convencer a tus padres de que cuiden a tu perro cuando te vas de vacaciones

¿Cómo convencer a tus padres para que se queden con el perro?

Tener una mascota es algo enriquecedor. El contacto con un animal educa a los niños, los convierte en responsables y proporciona una compañía y un cariño que en ocasiones supera al que puedan dar las personas. Aquellos que han tenido perros en casa saben que en poco tiempo se convierten en uno más de la familia y que es imposible no tenerles aprecio.

Sin embargo el hecho de que formen parte de la familia, como un miembro más, en la mayor parte de las ocasiones no nos supone un problema. En nuestro día a día no nos causa mayor problema tener perros en casa. Simplemente debemos adaptar nuestros horarios para prestarles las atenciones necesarias, educarles para que convivan con los demás y el animal no supone ninguna limitación.

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Determinadas vacaciones no pueden ser adaptadas para los perros, bien porque no los admitan en el alojamiento al que vamos, porque supongan muchas horas de viaje o porque no sean compatibles con los planes que tenemos previstos. En caso de tener que dejar a nuestra mascota en la casa de alguien la primera idea que se nos vendrá a la mente son nuestros padres. Al fin y al cabo, ¿qué no harían por nosotros?

Alguien de tu entorno cercano puede cuidar de él

La responsabilidad de cuidar una mascota

Vale, sí que están dispuestos a sacrificarse en múltiples ocasiones por nosotros, pero ¿aceptarían quedarse con los perros en vacaciones? Cuando nos hacemos con una mascota sabemos que debemos hacernos responsables de ella, aunque eso suponga algún sacrificio como estar pendiente de todos los días y no tener más libertad.

Los perros, además, conllevan más cuidados que otros animales porque hay que sacarlos a pasear y a hacer sus necesidades varias veces al día. Además no pueden encerrarse en un lugar, sino dejarlos en casa o en un espacio abierto en el que estén controlados. Deben sentirse acompañados y queridos y se les debe dar comida y agua cada ciertas horas.

Un familiar puede ser una opción para dejar a tu perro

Esto supondrá que casi a ciencia cierta tengan que variar sus hábitos diarios y que en alguna ocasión se vean limitados a la hora de poner en marcha tal o cual plan. No podemos limitarles de tal manera si no quieren, pero también es cierto que pueden estar encantados con quedarse unos días con el animal.

Mascotas como hijos

En la actualidad son cada vez más las parejas que no tienen hijos pero sí animales de compañía. Aunque no sea comparable una cosa con la otra sí es cierto que esa mascota recibe prácticamente todo el cariño que recibiría un niño y no sólo por parte de sus 'padres', sino también de otros miembros de la familia, como pueden ser los abuelos.

Si es así a buen seguro que los padres estarán encantados de quedarse durante unos días en verano con los perros. Para ponérselo más fácil hay que darles todas las comodidades posibles. El animal se sentirá más tranquilo si mientras sus dueños se van de vacaciones permanece en la casa, pero si a los padres les viene mejor llevarlo a la suya debemos estar dispuestos al traslado.

¿Cómo actuar con tu perro si tienes hijos y te vas de vacaciones

Además, en el caso de que los padres vivan en un pueblo o en una zona con espacios verdes los perros estarán encantados con el cambio de ubicación, ya que gozará de una libertad que no tienen en los pisos. En este caso la responsabilidad de los padres por cuidar a las mascotas es la misma, aunque también es cierto que tienen mayor libertad ellos mismos y no precisarán estar tan pendientes de ellas.

Qué ofrecerles a cambio

Hay parejas que tienen perros porque desde pequeños han tenido mascotas. Si es así probablemente tus padres sigan teniendo algún animal en casa y, si se quieren ir de vacaciones, precisarán de alguien que lo cuide. Para convencerles de que se queden con el perro en verano nada como ofrecerte a devolverles el favor cuando sea necesario.

Muestra tu agradecimiento y devuelve el favor

Aunque los padres están dispuestos a sacrificarse por los hijos, incluso en verano cuidando a sus mascotas, tampoco hay que resultar demasiado aprovechado. Se les puede pedir que cuiden del animal en alguna ocasión, pero no podemos convertirlo en una norma por la que cada dos semanas les dejemos al perro para irnos de escapada.